Comer bien es un placer, y dónde y cómo hacerlo tiene casi la misma importancia. Poner la mesa es un gesto que todos realizamos casi a diario pero al igual que los regalos, prepararlos cuidadosamente puede marcar la diferencia.
Cuando tenemos invitados en casa pensamos el menú, los vinos, el postre… ¿pero qué pasa con los arreglos de la mesa?; “¿Arreglos de mesa? puede parecer que en ésto no se fija nadie pero cuando se hace, el éxito está asegurado.
El estilo lo marca la ocasión y por supuesto vuestro gusto. Aquí van unas propuestas que hemos seleccionado pensando en el buen tiempo y éstos meses de verano…A la mesa!
1. Rústico. Hay un dicho sobre los alimentos que dice “si crecen juntos, pegan juntos”, pues bien, en decoración ocurre algo muy parecido. El hombre y la naturaleza son completamente afines, si quieres sorprender a tus invitados con algo original y que se salga del típico jarrón con flores tira de imaginación y haz un bonito centro de mesa con musgo, corcho, unas ramas…puedes jugar y servir la comida en tablas de madera o mármol.
2. Natural. Hay veces que menos es más, si eres de esos a los que le gusta la mesa limpia no lo dudes y apuesta por los colores neutros. Seguro que tu vajilla es blanca, un mantel en tonos grises o tierra será suficiente para resaltarla y si quieres darle un punto échale imaginación a los bajoplatos, puedes usar tablas, paños, pizarras…
3. Colorista. Los colores transmiten alegría y creatividad. Si éste es tu estilo las combinaciones son casi ilimitadas!, puedes darle un rollo campestre y usar unos botes de conservas como jarrón para unas flores, servilletas a cuadros (aunque sean diferentes). Imagina todo aquello que llevarías a un picnic y trasládalo a la mesa.
4. Veraniego. Tropical, playero el verano tiene muchos estilos. Aquí os traemos dos propuestas basadas en los colores azul y verde. Imagina que estás en una Isla ¿qué cosas tendrías a mano?, hojas, algunas flores, incluso arena de playa o conchas…Se trata de buscar la frescura
5. Sofisticado. Atemporal y seguro, para aquellos que admiran la belleza de lo clásico. No pueden faltar los toques dorados y unas bonitas flores (cuidado con las de olor más fuerte, interfieren con la comida), en éste estilo podemos dejarnos llevar con la cristalería y colocar al menos tres servicios (agua, vino y champagne para una ocasión especial) o sólo los dos primeros si es algo más relajado. Podemos darle nuestro toque personal y decorar el centro con unas frutas, unas plumas…o por supuesto unas bonitas velas. No se trata de inundar la mesa con piezas artificiales sino de que todos los elementos se acompañen entre sí.
Éstos son sólo algunos ejemplos de cómo darle estilo a una mesa con invitados. Mi consejo es que todo lo que hagáis lo hagáis a vuestro gusto y con ilusión y seguro que sorprenderéis a vuestros invitados!.
Nos encantaría saber qué estilo os gusta más así que vuestros comentarios son muy bienvenidos!